El Olivar Tradicional en el Siglo XXI

El Olivar Tradicional en el Siglo-XXI

En estos tiempos que corren tan aciagos, con pandemias mundiales golpeando el mundo, y oscuros nubarrones económicos acercándose en el horizonte, es difícil apostar por cualquier actividad, y menos una agrícola. Con unos precios de aceite de oliva virgen extra, que apenas superan los 2€ por kilo, cuando la rentabilidad de cualquier AOVE empieza a partir de unos 2,50€xkg, lo normal, sería plegar velas, y dejar de apostar por este aceite tan nuestro.

Siempre he dicho, que los españoles tenemos un gran problema por la escasa valoración que damos a todo lo que forma parte de este gran país nuestro, al que muchos, se avergüenzan de llamar por su nombre, y no son capaces de pronunciar la palabra ESPAÑA.

Nosotros en CASA DEL ÁGUILA apostamos por la calidad, y la alta valoración que debe tener un AOVE PREMIUM “made in Spain”. Los italianos lo hacen con los suyos, y les va la mar de bien. Eso sí, lo primero es que ellos mismo se lo creen, y luego lo venden, al igual que los franceses con sus vinos de calidad. No es lo mismo un vino “GRAND CRU CLASSE Chateau Mouton Rothschild” con sus viñedos tan antiguos, que otro que venga de cualquier viñedo recién plantado.

Un aceite que viene de unos olivares centenarios, incluso milenarios, como los nuestros de Los Naranjos, tiene, aunque solo sea por la longevidad de los mismos, un valor incalculable. Y por eso, nosotros apostamos por darle el valor real que tiene un AOVE, que viene de nuestro querido MILENARIO (Nuestro olivo más viejo),

Por todo lo anterior,en CASA DEL ÁGUILA solo embotellamos aquello que sabe a excepcional, que sabe a historia, y que solo se puede embotellar porque ha llegado a su máxima calidad.

Produce estupor y pena ver por tierras andaluzas, olivos arrancados de cuajo, aquellos que se les acabó el tiempo, y tanto aceite han dado a través de sus largos años. Solo se valora su “rentabilidad” en función del coste actual, pero nunca valoramos su coste real, su coste histórico, y mucho menos su coste patriótico. A ningún francés en su sano juicio se le ocurriría arrancar un viñedo de edad similar.

Aquí en España, se valora más la garrafa de una aceite de oliva corriente, que una botella de AOVE, sencillamente porque es más barato. Triste.

En CASA DEL ÁGUILA remamos a contracorriente, porque estamos convencidos que el futuro está enfocado a la alta calidad, y la valoración que debe tener un producto que viene escribiendo nuestra historia con nuestra firma desde 1756.